Como nos dice Germán Gullón en una reseña literaria del periódico El Cultural, "quizás la complicada biografía de Highsmith constituyó un perfecto caldo para el cultivo de una personalidad tan llena de desviaciones. Su padre nunca figuró en su vida; sí su madre, aunque en exceso. Esta relación la marcó para siempre, convirtiéndola en una persona de difícil trato. Se salvó gracias a la decidida vocación por las letras, evidente ya en la adolescencia, y redondeada por la educación recibida en el exclusivo Barnard College de Nueva York. Tras años de trabajo para diversas editoriales, redactó, por consejo de Capote Extraños en un tren (1950), su éxito inicial. Fue una mujer infeliz, solitaria, alcohólica, y su lesbianismo nunca floreció en un amor constante. En 1963 abandonó EE.UU. y marchó a Inglaterra, de allí a Francia (1967) y Suiza (1981)."
Voy a dejaros unos enlaces muy interesantes para aproximarnos a esta autora (¡¡por fin una mujer!!) y a su obra. Empezamos con el texto completo.
- Artículo de El Diario titulado "Patricia Highsmith y la falsificación del yo"
- Reseña sobre El juego de Ripley
- Apuntes sobre la biografía de Patricia Highsmith, El Talento de Mr. Ripley, temas más relevantes en su obra y sugerencias para el comentario crítico.
- Patricia Highsmith, además de una larga lista de novelas, escribió numerosos cuentos, entre los que destacamos los Pequeños cuentos misóginos, publicados en 1975. Jugando con lo real y lo imaginario, con lo absurdo y con los juegos de palabras, da comienzo este compilación de cuentos con la historia de "La mano", en la que un hombre se vuelve loco después de pedir la mano al padre de su amada. Y es que, literalmente, la obtendrá. También os recomendamos La coartada perfecta. Una vez más, Patricia ahonda en la mente del protagonista, Howard, quien asesina a George para conseguir casarse con Mary, la chica que convive con él y a la que trata como si fuera su propia hija, dándose una relación paternalista y demasiado posesiva. George no quiere que Mary se case con Howard, por lo que este decide acabar con su vida para lograr el propósito deseado. Nos interesan las disquisiciones, la profundidad de análisis de la mente criminal de los personajes, el poder ver el otro lado del crimen y olvidar la visión tan maniquea de la historia. Como suele ocurrir con las naraciones de Highsmith la división entre el bien y el mal se difumina cada vez más, lo que provoca reflexiones y estupor en el lector, y por eso resulta tan interesante la literatura de esta escritora.